jueves, enero 02, 2014

La vida es demasiado corta para estar esperando.



La verdad es que esta entrada de año me la he tomado de una manera muy distinta a como lo he hecho el resto de los años anteriores. Al brindar, mi hermana Chini y yo nos miramos a los ojos y nos dijimos,"¡Feliz Año Nuevo hermana! a vivir la vida como nos venga y a pasarlo pipa", ¿Y saben por qué? Porque la vida no son planes, ni promesas, ni añoranzas, ni melancolía de lo que no fue. No. La vida es lo que haces cada uno de los días de tu vida.

Pero también siempre me ha gustado hacer balance del año que he tenido porque cada fin de año siempre he pensado que cada año de mi vida ha sido mi mejor año, y este año 2013, ha sido espectacular en todos los sentidos: tuve un amor, he tenido trabajo para aburrir, tuve una salud de hierro, viajé como nunca lo hice, he conocido a gente increíble, he tenido experiencias que ni en mis mejores sueños, he encontrado nuevos amigos, se han arreglado problemas que traían mucha cola, he bailado y reído como nunca en mi vida, me he dedicado mucho tiempo a cuidarme mentalmente y físicamente, mi hermana se vino a vivir a Barcelona y nos estamos conociendo los restaurantes y discotecas con más flow de Bcn (¡ya nos conocen en casi todas!)... Y también hubo cosas malas, ¿pero saben qué? ¡que se me olvidaron!

Ahora empieza un nuevo año, y hace pocas horas que acabo de llegar de La Graciosa, con toda mi familia, de celebrar la entrada del nuevo año, pero esta vez sin propósitos, salvo uno solo: que este año vuelva a ser el mejor año de mi vida.

Le doy gracias a la magia de la vida, a esa magia que tenemos que saber ver, palpar y vivir. Le doy gracias a cada minuto vivido de mi vida, ¡¡y tengo las fuerzas bien guardadas y concentradas para empezar esta nueva aventura con un flow masssivo!!

Nos veremos, o puede que no, ¿qué más da? sólo hay que recordar que no nos podemos dejar nada en el tintero, que lo que no hagamos hoy, no lo podremos hacer mañana, que las copas que no te bebes hoy con los colegas, las risas, los bailes, los vacilones, los ligues, los amores.... que no te gozas hoy, no volverán mañana. La vida es demasiado corta para estar esperando. Ese debe ser nuestro verdadero propósito de año.

¡Feliz gozadera de año!