lunes, octubre 26, 2009

YO, S.A. Nuevo artículo en el Diario de Avisos


Hace unos días que terminé de leerme un libro altamente recomendable para quien considere que su mejor inversión es uno mismo: Marca personal, de Andrés Pérez Ortega.

El personal branding, que es así como se llama la disciplina, consiste en convertirse en la mejor opción entre muchos candidatos, ser tenido en cuenta, posicionándote en la mente de los demás del modo en que deseas para que, finalmente, seas elegido.

Nuestra marca personal no es algo que construimos ni diseñamos, sino que descubrimos, y esto es lo que hace a esta materia ser fascinante, pues de esta manera no sólo nos posicionamos, sino que además aportamos valor, ganamos en seguridad y nos posicionamos en el mercado como marca, pero como marca personal.

Pero para ello debes ofrecer algo que te diferencie de los demás, y ese algo no es otra cosa que tú mismo, partiendo de la base de que somos únicos y de que cada uno de nosotros tiene que aportar algo completamente diferente al resto. Pero este trabajo se extiende a toda una vida. No es un trabajo a corto plazo, sino todo lo contrario.

Si has elegido el camino de convertirte en una marca personal, como yo he hecho, debo comunicarte que has elegido depender de ti mismo, coger el control de tu vida y ser responsable de todas las decisiones que tomas; además habrás dado el paso sicológico de colocarte en el mundo de los profesionales que aportan valor y no buscan trabajo, sino que ofrecen sus servicios a cambio de una contraprestación justa.

Esto sólo se consigue teniendo un espíritu de innovación, de mejora constante, de sacrificio por seguir en la búsqueda constante de habilidades personales, con una incansable motivación por convertirte en la opción preferente y, todo esto, sumado a una mentalidad de satisfacción de necesidades.

Lo más fascinante de este concepto es el cambio de mentalidad que supone, pues la marca personal pretende que los demás te busquen. ¿Cómo? Pues detectando necesidades. Tu misión es detectar las carencias y encontrar la manera de satisfacerlas usando tu marca personal para ser la primera opción a tener en cuenta. Pero tiene que haber sustancia detrás de lo que ofreces, se trata de ofrecer y dar valor a algo que has creado a partir de tu propia materia prima.

Un profesional con marca personal no busca empleo, sino que localiza a clientes que estén interesados en lo que ofrece. El currículo ya está muerto, no transmite las habilidades de la persona, ni la motivación ni, en suma, su marca personal. Lo que realmente importa no son los títulos (y lo dice una persona que está rodeada de ellos), sino lo que eres capaz de hacer. Eso es lo que te convierte en un ser valioso.

Hay un factor imprescindible e inherente a la marca personal, y es que, una marca personal no puede existir sola, sólo adquiere valor si se relaciona con los demás, cuando es capaz de que se le relacionen con una necesidad no satisfecha, y por eso la retroalimentación debe ser constante y desarrollada en el tiempo. Es por este motivo que debemos interactuar constantemente con otras personas para forjar nuestra imagen como proveedores de servicios.

También podemos afirmar que el personal branding es una filosofía de vida o una manera de gestionar tu vida centrada en los valores que verdaderamente son importantes para ti y con total transparencia, pues esta es la base de toda relación de confianza.

Este planteamiento hace ver las cosas de una manera completamente distinta pero, sobre todo, es una puerta que se abre a tantos y tantos profesionales que no saben cómo gestionar sus vidas, sus trabajos, o cómo enfocar las habilidades que poseen y no han sido tenidas en cuenta. Me sumo a este grupo de personas que quieren dejar huella siendo auténticos, sin fingir ser otras personas y potenciando todas las aptitudes propias que nos hacen ser únicos.

¿Quieres saber cuál es tu marca personal? Empieza preguntando a las personas con las que más tengas confianza qué concepto tienen de ti. Es una óptima manera de empezar. Sé crítico contigo mismo, analiza cada una de las virtudes y de los defectos que se relacionan contigo, acéptalos y ponte manos a la obra. Tu marca personal no es el concepto que tienes tú de ti mismo, es el que tienen los demás de ti mismo. Es por eso que hay que cuidarla a conciencia.

El que consigas o no una oportunidad en un trabajo, un cliente o una promoción, va a depender de que estés en el grupo en el que hay que elegir a la persona adecuada. La percepción tiene tanto que ver con conseguir una entrevista o una oportunidad, como con la habilidad y la experiencia.

Antes de ponernos manos a la obra tenemos que pensar, reflexionar, meditar y poner en orden las ideas. Asume tus errores, no es fácil, pero hay que hacerlo, y conoce tus aciertos. Sólo cuando tengamos claro cuál es nuestro contenido y tengamos una idea hecha de hacia dónde nos queremos dirigir es cuando nos podemos poner en marcha.

Una de las razones por las cuales decantarse por ser tú la empresa en la cual invertir es que en la economía global todavía no hay evidencias de creación de empleo, sino justo todo lo contrario. El desempleo sigue aumentando. Pero no sólo en España, sino en casi todo el mundo, y millones de trabajos están desapareciendo. En contrapartida, nos hemos convertido en un mundo de deudores, hipotecados hasta las cejas con préstamos que exceden el valor de nuestros bienes, y créditos que superan nuestras posibilidades para pagarlos. Pero esta recesión además ha cambiado la naturaleza del desempleo, haciendo mucho más duro para los que no tienen trabajo encontrar uno; ni siquiera trabajos basura. Sólo invirtiendo en innovación y en nosotros mismos como marca podemos remendar este sistema que nos ha arruinado a todos.

Y ahora sólo plantéate una cuestión: ¿quieres seguir siendo un empleado más, un currito, un clónico profesional lleno de masters y carreras en la cuerda floja, o quieres una oportunidad para cambiar el estatus quo siendo tú uno de los protagonistas? No hay que tener miedo para hacer las cosas, pero sí hay que estar seguro de querer dar los pasos hacia delante en un camino en el que no hay vuelta atrás. Te animo a que descubras lo mejor que hay dentro de ti, a descubrir lo que te hace único en el mundo y a que le saques todo el beneficio económico justo y posible. En definitiva, usa tu instinto, esa poderosa arma que has mermado durante tantos años racionalizando tu vida.

No es un camino fácil, es el más difícil y el menos transitado, pero es la solución, y es el que marca la diferencia, el que usa el instinto como guía, el de la autenticidad, el de la plena satisfacción. Pero ¡ojo! currando como no lo has hecho nunca. ¿Estás preparado?

6 comentarios:

Sandra dijo...

Ey nena, muuuy interesante! Bieeeen...
MUASSSS

martin martin dijo...

El artículo, no sólo me parece interesante, sino MUY NECESARIO. Tan sólo añadir que para poder desarrollar el "personal branding" es muy necesario practicar además el "networking" casi como religión.
Para los que quieran enlazar ambos términos, les invito a leer "el éxito en 6 cafés". No se equivoquen: no tiene nada que ver no con autoayuda barata ni nada que se le parezca sino con un análisis serio de lo que significan ambos términos y sobretodo de la enorme potencia que resulta al combinarlos

Sofi in the city dijo...

Muchas gracias Martín, qué casualidad!! ese libro lo tengo en la lista de libros pendientes por comprar. Creo que estamos en la misma onda, y eso me gusta mucho, porque encontrar gente off line con la que hablar y sentirme comprendida muy, pero que muy reconfortante.

Hasta pronto!!

Manu

Unknown dijo...

Fantástico artículo! Inspirador, motivador, sabio...

Clap, clap, clap!!! Todos mis aplausos para Manu!

: )

Anónimo dijo...

¡Muy buen artículo! Adoptar una vida profesional orientada al Personal Branding requiere un esfuerzo inicial fuerte y constante, además de una pizca de suerte y networking.

Forjarte tu propia marca es algo difícil, porque tienes que conseguir acercarte a personas que compartan tus mismos valores para poder construirla y vivir de ella.

Vemos que tú lo estás consiguiendo. Este tipo de artículos ayudan a que así sea.

Seguimos sembrando.

Sofi in the city dijo...

Muchas gracias por tu comentario. Es cierto, la verdad que forjarte tu propia marca personal es difícil y requiere mucho trabajo y tiempo, pero como todo en esta vida.

Yo soy partidaria de que la suerte, como la felicidad, hay que salir a buscarla y, si tienes fe y constancia, la encontrarás. Y eso lo captan las personas que están en tu onda. Hay ocasiones en que solo hay que poner en funcionamiento la maquinaria y el resto viene solo.

Seguimos sembrando, sí señor...